El jueves, viernes y sábado de la semana pasada tuvo lugar en la ciudad alicantina de Benidorm la segunda edición del Low Cost Festival. Este año ha acogido a más de 50 artistas y 50.000 asistentes y se ha consolidado definitivamente como una muy interesante alternativa para los festivaleros comodones que, como yo, quieren una cama en vez de una tienda de campaña tras una intensa jornada de conciertos. Durante tres días, ese surrealista emplazamiento que es Benidorm -con sus rascacielos aberrantes, sus pubs hamburgueseros y sus guiris enrojecidos- se convirtió al indie y nos hizo disfrutar de una muy buena y diversa selección de actuaciones.
The Pains of being pure at heart |
Lori Meyers |
Fangoria llegan después, con su magnetismo discotequero y su almodovariana puesta en escena tan hortera como divertida, y el subidón es generalizado e inevitable con esas canciones convertidas en himnos como Bailando, A quién le importa o Ni tu ni nadie.
Con el rock bailable de Supersubmarina despedimos la noche, porque la tralla de Loo Placido nos hace huir despavoridos a pesar de lo animados que estamos. Los primeros rayos de la mañana mecen nuestro sueño desde nuestro apartahotel de mil pisos en el que intentamos vencer el calor y retomar fuerzas para afrontar lo mucho que queda todavía por llegar.
Ok Go |
Abrimos la jornada del viernes con el pop bilingüe y enganchoso de Sidonie para recibir luego a los norteamericanos OK GO. Los reyes del video-clip aparecen sonrientes y vestidos cada uno de un color para ofrecernos un concierto memorable en cuanto a espectáculo se refiere, lleno de carisma y divertidas sorpresas. El baile de un grupo de fans en A million ways, la genial interpretación de Return con el sonar estratégico de un grupo de campanas como único acompañamiento o el repentino descenso a la pista del líder Damian Kulash para cantar la delicada Last leaf , lograron compensar lo que en mi opinión fue un mal escogido repertorio (cantaron bastantes temas mediocres y se dejaron muchos otros muy buenos). Todo un despliegue de ingenio y simpatía.
Mika |
La otra gran sorpresa de la noche llega más tarde de la mano de Mika, que aterrizó directamente desde el aeropuerto sobre el escenario Budwaiser sin pasar por camerinos ni hacer prueba de sonido tras un vuelo que llegaba con retraso. Y menuda fiesta la que nos regaló el chico, con sus gorgoritos imposibles, sus bailoteos enloquecidos y sus temazos de noche de fiesta y purpurina. Yo misma, tan recelosa que me había mostrado apenas hacía unos minutos ante la perspectiva de esa actuación, fui la primera en caer rendida ante exitazos como Take it easy, Love today, o Grace Kelly. Con un muy fluido español y acompañado de una banda de lo más simpática, Mika demostró ser un performer en toda regla, un líder indiscutible capaz de seducir no sólo a los seguidores de Fama sino también a los indies más desconfiados.
El electro de los australianos Cut Copy arranca nuestros últimos bailes antes de dar paso a las sesiones de los djs con la que se da por finalizada esta segunda jornada del festival.
Shout Out Louds |
Y llega entonces el último concierto del festival en el que tengo interés, el de los también suecos Shout Out Louds. “Gracias por estar aquí tan tarde”, nos dicen, inocentes, probablemente sin saber que esa es la mejor hora en la que uno puede tocar en un festival en España.
La mayoría del público se concentra en The Klaxons, pero los pocos que estamos en el escenario azul ¡qué bien lo pasamos! Las buenas canciones se siguen una tras otra: The Comeback , Please, please, please, Your parents leaving room, Impossible o Tonight I have to leave it, con sus percusiones enganchosas, su cadencia marcial y la voz nostálgica del cantante y compositor Adam Olenius rompiendo en la noche de verano y llevando de la mano nuestros canturreos felices. También ellos parecen contagiarse de nuestra alegría y se muestran mucho más animados de lo que se habían dejado ver hacía unos meses en su concierto en Barcelona. Espero tener la oportunidad de verles de nuevo muy pronto.
Los djs se encargan de despedir la noche una vez más: la sesión más dura de Steve Aoki, la ecléctica propuesta de KGB djs y los temazos indies de la mano de Santos & Mr. Chase.
Amanece un nuevo día en Benidorm y una manada de gentes ojerosas nos arrastramos por sus calles ahora desiertas que en tan sólo unas horas quedarán abarrotadas de turistas y jaleo pachanguero. Con las cabezas abotargadas de canciones y buenos recuerdos, nos metemos en la cama y aplaudimos en silencio. Bravo Low Cost. Nos ha ofrecido exactamente lo que prometía y que, de hecho, quedaba resumido en el cartel que colgaba en lo alto de uno de los escenarios. Grandes momentos te esperan, podía leerse. Y cuánta razón tenía.
Fotos: Tunya / Ana
mmm. que envidia!
Buena crónica, muy completa. Nosotros vimos de refilón Shout Out Louds pero tan poco que no hemos hecho valoracion, una lástima perdernoslos al parecer 😉
Jordi: ¡El año que viene no puedes perdértelo! ¡Te echamos de menos!
Lurking People: ¡Gracias por el comentario! Sí, Shout Out Louds molaron mucho. ¡Qué buena música hacen estos Suecos!
Yo también les echo de menos. Iré a Barna en septiembre pero antes iré a Berlín, ¿no se apuntan?
Gran crónica de gran festival!
Veo que te conquistó Mika y que te has olvidado del grupo revelación: Gratis! "baila a tu nuevo diós, únete a la secta!" jajaja!
Ales
PD: Jordi, a ver si nos vemos!